martes, 26 de febrero de 2013

Y no tenerte

    

Tanto ama el sol a la luna
que, aplacando sus deseos,
por el temor a abrasarla,
le basta con darle luz. 

No puedo evitar estremecerme
al recordar tus palabras;
y el espejo es mi cómplice
en busca de mis ojos olvidados. 

No pienses más allá, 
y no influyas en el rumbo,
ni detengas tu caminar. 

Avanza, como avanza el mundo. 




lunes, 25 de febrero de 2013

Me gusta


     Me gusta
     el púrpura sobre los montes, 
     el silencio de la mañana,
     los campos enharinados de invierno,
     la bruma que acaricia con su brillo,
     el sol que despereza a los pájaros,
     la sombra del junco cruzando el arroyo,
     las ramas del árbol cosquilleando al cielo,
     la nube que observa desde su soledad.

     Me he asomado a la ventana
     y me gusta este día.



domingo, 24 de febrero de 2013

Donde el vuelo le lleva


Volaba.
Sobre un campo de rubios trigales, 
volaba.

Sus alas empujaban con fuerza 
contra un viento duro como piedra.
Se dejaba caer exhausto
y remontaba en un hálito de coraje.

Un abedul erguido le rozó con su copa la cara
y sintió que la cuchillada le llegó al alma.
Notó correr su sangre por la mejilla y, 
sin dejar de batir las alas,
puso sus ojos más arriba.

Las nubes parecían ofrecerle su tierna caricia.
Las imaginó como algodones celestes
y se lanzó hacia lo alto.

Y subió, subió, subió...





sábado, 23 de febrero de 2013

Sonríe, payaso


     Sonríe, payaso, colócate tu nariz y píntate tu sonrisa, aunque el dolor te haga torcer el gesto. 

     Si pudiese coger un trozo de mi corazón y dároslo para aumentar vuestras fuerzas, lo haría. Pero sé que no es necesario porque no se puede tener más corazón que el que tenéis vosotros. 

     Sé que vuestra vitalidad puede con cualquiera de los enemigos que intentan apoderarse de vuestra salud. Ahora que vuestras noches se plagan de dragones nocturnos, en un alarde de fortaleza, aún seguís pintando de colores las ovejas y organizando vuestro ejército espartano para librar esta batalla. Una batalla que os llevará al triunfo.

     No os conocéis entre vosotros, pero yo sí. Vuestros enemigos no son los mismos, pero la lucha es igual.
     La bendita casualidad ha hecho que forméis parte de mi vida y que me estéis enseñando lo que de verdad merece la pena. Hace falta mucha bondad para dar tanto; hace falta mucha generosidad para ser payaso y, hasta en los momentos más duros, regalar vuestra genialidad y vuestro buen humor.

     Gracias por estar ahí, gracias por vuestras energías, gracias por enseñarme tanto, gracias por ser tan extraordinarios.


     Dedicado a dos artistas, actores, personas y amigos que hacen tan grande el oficio de payaso.

viernes, 22 de febrero de 2013

Recuerda


"Recuerda...
Que siempre existen tres enfoques en cada historia: mi verdad, tu verdad y la Verdad.
Que toma mucho tiempo llegar a ser la persona que deseas ser.
Que es más fácil reaccionar que pensar.
Que podemos hacer mucho más cosas de las que creemos poder hacer.
Que no importan nuestras circunstancias, lo importante es cómo interpretamos nuestras circunstancias.
Que no podemos forzar a una persona a amarnos, únicamente podemos ser alguien que ama. El resto depende de los otros.
Que requiere años desarrollar la confianza y un segundo destruirla.
Que dos personas pueden observar la misma cosa, y ver algo totalmente diferente.
Que las personas honestas tienen más éxito con el paso del tiempo.
Que podemos escribir o hablar de nuestros sentimientos, para aliviar mucho dolor.
Que no importa cuan lejos he estado de DIOS, siempre me vuelve a recibir.
Que todos somos responsables de nuestros actos.
Que existen personas que me quieren mucho, pero no saben expresarlo.
Que puedo hacer todo o nada con mi mejor amigo y siempre gozar el momento.
Que a veces las personas que menos esperamos, son las primeras en apoyarnos en los momentos más difíciles.
Que la madurez tiene que ver más con la experiencia que hemos vivido, que con los años que hemos cumplido.
Que hay dos días de la semana por los que no debemos de preocuparnos: ayer y mañana. El único momento valioso es AHORA.
Que aunque quiera mucho a la gente, algunas personas no me devolverán ese amor.
Que no debo competir contra lo mejor de otros, sino competir con lo mejor de mí.
Que puedo hacer algo por impulso y arrepentirme el resto de mi vida.
Que la pasión de un sentimiento desaparece rápidamente.
Que si no controlo mi actitud, mi actitud me controlará a mí.
Que nunca debo decirle a un niño que sus sueños son ridículos, ¿qué pasa si me cree?
Que es más importante que me perdone a mí mismo a que otros me perdonen.
Que no importa si mi corazón está herido, el mundo sigue girando.
Que la violencia atrae más violencia. Que decir una verdad a medias es peor que una mentira.
Que las personas que critican a los otros, también me criticarán cuando tengan la oportunidad.
Que es difícil ser positivo cuando estoy cansado.
Que hay mucha diferencia entre la perfección y la excelencia.
Que los políticos hablan igual en todos los idiomas.
Que es mucho mejor expresar mis sentimientos, que guardarlos dentro de mí.
Que al final de la vida me doy cuenta que las únicas cosas que valieron la pena son: Dios, mi familia, un grupo muy selecto de amigos y unas experiencias que me dieron crecimiento personal. Para ser exitosos no tenemos que hacer cosas extraordinarias. Hagamos cosas ordinarias, extraordinariamente bien.
Si alguna vez no te dan una sonrisa esperada, se generoso y da la tuya, porque nadie tiene tanta necesidad de una sonrisa como aquel que no sabe sonreír."
Mahatma Gandhi
 

jueves, 21 de febrero de 2013

De caminar solo.


     Manuel se volvió a calzar los zapatos de caminar solo. Los cordones se empeñaron en estrangular sus dedos durante un rato, hasta que consiguió dominarlos y organizar sus idas y venidas a través de los ojales.
     
     Manuel se miró al espejo y se colocó su suave sonrisa.

     Suavemente, como llevados de la inercia, sus pies comenzaron su rutina. Arriba, adelante, abajo, flexión, empuje... arriba, adelante, flexión... 
Con total coordinación compartían el espacio derecho e izquierdo. Ni uno suplantaba al otro, ni el otro relegaba al uno.

     ¡Qué sencilla convivencia!

     Manuel salió a la calle y pensó en las infinitas posibilidades que le ofrecía el mundo. Solo.

     Sus pies seguían discretamente las instrucciones silenciosas de su amo.

     Manuel se encontró con infinidad de personas ese día. Compartió, rió, se emocionó y vivió. Y al final volvió a donde había empezado. Solo.

     A Manuel no le apenaba estar solo. Porque tenía soledad suficiente para compartir con los viajeros que encontraba en su camino. 

     Manuel se descalzó y guardó por un rato los zapatos de caminar solo. 


Desiderata


    Camina plácido entre el ruido y la prisa, y piensa en la paz que se puede encontrar en el silencio. En cuanto sea posible y sin rendirte, mantén buenas relaciones con todas las personas. Enuncia tu verdad de una manera serena y clara, y escucha a los demás, incluso al torpe e ignorante, también ellos tienen su propia historia. 

     Evita a las personas ruidosas y agresivas, ya que son un fastidio para el espíritu. Si te comparas con los demás, te volverás vano y amargado pues siempre habrá personas más grandes y más pequeñas que tú. 

     Alégrate tanto de tus realizaciones como de tus proyectos. Mantén el interés en tu propia carrera, por humilde que sea, ella es un verdadero tesoro en el fortuito cambiar de los tiempos. 
     Sé cauto en tus negocios, pues en el mundo abundan las gentes sin escrúpulos. Mas no dejes que esto te impida reconocer la virtud; y dondequiera que mires la vida está llena de heroísmo. 

     Sé sincero contigo mismo, en especial no finjas el afecto, ni seas cínico en el amor, porque cuando aparece la aridez y el desencanto en el rostro, se convierte en algo tan perenne como la hierba.

     Acepta con serenidad el consejo de los años, abandonando con donaire las cosas de la juventud. Cultiva la firmeza del espíritu para que te proteja de las adversidades repentinas, muchos temores nacen de la fatiga y la soledad. Sobre una sana disciplina, sé benigno contigo mismo.

     No eres más que una criatura del universo, no menos que los árboles y las estrellas, tienes derecho a existir, y si no tienes ninguna duda, el mundo se desplegará ante ti.
     Por eso debes estar en paz con Dios, cualquiera que sea tu idea de Él, y sean cualesquiera tus trabajos y aspiraciones, conserva la paz con tu alma en la bulliciosa confusión de la vida.

Aún con todas sus farsas, penalidades y sueños fallidos, el mundo es hermoso todavía. Sé cuidadoso, esfuérzate por ser feliz.

-Max Ehrman


miércoles, 20 de febrero de 2013

Mi limón, mi...


     Aquel día, Diego había encontrado un limón de plástico en el trastero. Extraño elemento, pensó. ¿Y qué se puede hacer con un limón de plástico? Sus amigos tenían el Scalextric, o el Ibertren, o aquel coche teledirigido del que nunca recordó la marca, sólo la sensación de que sus dedos se movían en el aire para imaginar cómo sería manejar aquellos juguetes.

     Su limón de plástico estaba hueco y había sido contenedor de un sabroso helado, pero de aquella golosina ya con conservaba nada. Sin embargo, algo le atraía de ese plástico cítrico sin sabor.
     ¡A comer! oyó decir a su madre. Y guardó el limón en su caja del tesoro donde guardaba su libreta alopécica de hojas, su lapicero despuntado y su cuchilla Gillette. 

     Pasó la tarde pensando en la utilidad que podía dar a su limón de plástico. Con esa idea en la cabeza, le costó concentrarse en los deberes que le habían mandado en el colegio. Los terminó y abrió con expectación su caja del tesoro. Tomó casi hipnóticamente el lapicero y afiló su punta con la cuchilla de afeitar, abrió su libreta por una de sus escasas hojas y empezó a escribir "Clara y Miguel aparecen en escena y se sientan tras la mesa que está en el centro del escenario. Un limón es el único alimento que está sobre ella. Se miran... "

     Estaba seguro de que aquella función sería un gran éxito.


lunes, 18 de febrero de 2013

La sordera de don Francisco


     Quien oculta a parte de su familia y se avergüenza de ella, no estará nunca completo. Y seguirá sufriendo lo que llama incomprensión, que no es otra cosa que desconfianza por quienes conocen la verdad.

     Así uno se siente engañado por este cine español que pretende ir de niño pobre pero se mueve bajo las pautas del clasismo.
     Ese odio corporativo a los compañeros que realizan otra faceta del arte interpretativo no tiene ningún sentido para caminar juntos en pro del cine español. 

     Esquivando cualquier referencia al doblaje, resulta que en la gala de los Goya aparecen nominadas multitud de películas que han necesitado doblar para llegar al público. Los mismos que estigmatizan al doblaje se aprovechan de él. Utilizando una técnica que aborrecen con el único propósito de vender su arte, en mi opinión se convierten en deshonestos. Puedes hacer el amor, pero si no lo sientes y lo haces sólo por dinero, ya sabes lo que eres: o puta o chapero.
     La propia película ganadora a mejor película de animación da la sensación de que no tiene detrás a unos actores que dan vida con su voz a los dibujos. Ni una referencia al asunto.

     Será que odiamos nuestro idioma, porque el cine español que triunfa es el que está hecho en otra lengua, o mudo, o con actores a los que no se les entiende.

     Mientras no dejemos de avergonzarnos de nosotros mismos, nuestra cultura no saldrá del pozo.

domingo, 17 de febrero de 2013

Envidio o endeuvede


     Ayer me decía un amigo "la envidia es la medida de tu éxito". Vale, pero no me vale. No me vale hacer sentir envidia. Eso no me reporta nada, ni bienestar, ni tranquilidad, ni cualquier tipo de placer. Puede que para alguien el sentirse envidiado le produzca satisfacción. A mí no.
Porque además, sé que si estos envidiosos se pusiesen en mi piel comprenderían que no tiene sentido ese sentimiento. No tengo por qué ser envidiado. Todos tenemos cosas que nos hacen únicos y si desperdiciamos las energías en envidiar lo de otros, nos estaremos perdiendo grandes oportunidades.

     Desear sí, admirar también, pero no lo confundamos con esa envidia que es destructiva.
     Envidiar es desconocer, es quedarse con la superficie. Así como el desear ser envidiado es perderse millones de satisfacciones propias.

El río de mi niñez


     Todavía con el regusto del paso por el Real Sitio, fluye el Tajo con su paso lento y firme entre los dedos de la vega. 
     Calma y poder. 

     Las reses de la dehesa se acercan a besar sus tibias aguas mientras los campos tiñen de verde su espejo cadencioso. 
     Sosiego y vida.

     Sin algarabía ni alardes de grandeza acaricia los prados y las siembras ofreciendo a su paso la fertilidad de sus aguas.
     Generosidad y sencillez.

     No muy lejos, un agricultor dibuja con su azada los surcos de la tierra y lo mira mientras enjuga su frente cincelada por el viento y el sol.
     Trabajo y tesón.

     Y continúa henchido rumbo a Toledo donde, en un alarde de majestuosidad, girará en derredor para observar que poco ha cambiado.
     Carácter castellano.  



  

sábado, 16 de febrero de 2013

"¡Pues tú más!"


     Hubo un tiempo en que creí que mi triunfo era directamente proporcional al fracaso de los demás. Pensaba que mis logros se medían en relación a lo que hubiera conseguido superar a otros. Idea cruel, pero debo reconocer que así era.
      Mi gran éxito vino cuando descubrí que no debía compararme con lo que hubiesen conseguido otros. Independientemente de lo grandes que fuesen los demás, yo tenía un puesto en mi propio podio. Y empecé a vivir, a disfrutar de cada cosa que consigo y a aprender de cada fracaso. Sacar provecho de cada fracaso, comprenderlo, aceptarlo, no quedarme en él y no sufrir eternamente por el mismo.
     Ya no hay comparaciones, hay gestos únicos y momentos únicos y personales. Disfruto con mis éxitos y con los éxitos de quienes tengo al lado.

     Quizá sólo me entristece el sufrimiento que veo en quienes se empeñan en medir sus triunfos comparándolos con los de los demás.

     Feliz día único y personal.

viernes, 15 de febrero de 2013

Más allá de las rocas


Buscamos la libertad
y la llenamos de compromisos.

Buscamos el destino
y lo cargamos de presente.

Buscamos la felicidad
y la colmamos de pensamientos.

Si partiésemos de la nada
tendríamos espacio para
llenarlo de libertad,
cargarlo de destino
y colmarnos de felicidad.

El vacío del cielo
tiene espacio para nuestras alas
y horizonte para nuestro vuelo.

Lancémonos y dejemos 
que el viento nos dé en la cara,
que los sueños nos marquen el rumbo
hacia un final más allá de las rocas.


miércoles, 13 de febrero de 2013

Del blanco al negro


     Digan lo que digan y "hazan" lo que "hazan" todavía nos quedan unos cuantos avances para conseguir un nivel cultural aceptable. Y hablo de cultura, no de conocimientos (eso ya es otro cantar).
     Mientras no consideremos el teatro como cultura, más que como actividad de ocio, mal vamos. Pasamos del blanco al negro, calvos o con tres pelucas. La cuestión no es soltar inmensas cantidades de dinero para unos montajes donde todo el mundo (menos los actores) pilla cacho. Y así purgar las penas culturales con subvenciones millonarias a montajes que son más escaparate que cultura. La cuestión tampoco es dejar desamparado al teatro como mero objeto lúdico de consumo. Del blanco al negro.

      De tanto intentar acercar el teatro al público desconocedor hemos entrado en una mala costumbre. Muchos creen que es como los congelados o la Thermomix. Llévemelos a casa si quiere que lo compre. Raro, raro. El que quiere disfrutar del teatro lo hace. No imagino a nadie diciendo "¿cuándo me van a traer los cuadros de El Prado a casa para que los vea?" o "qué pena, no puedo ir a la biblioteca porque no abren los domingos". El que tiene intención ya se busca las mañas. Así que menos pose y más acción.

     Un pueblo que se cree culto sin serlo, cuando abre la boca se delata.  

martes, 12 de febrero de 2013

Ficción no es realidad


     Esta mañana un escalofrío me recorrió todo el cuerpo al escuchar por la radio unas secuencias del programa de televisión "Hermano mayor". Un individuo soltaba improperios contra su madre y su abuela e incluso las agredía (según narraban los locutores). Hasta ahí mi indignación se basaba en lo desalmados que pueden ser algunos tipejos. ¿Cómo se puede ser tan cruel con las personas que te están dando cariño? ¡Que son su madre y su abuela, por Dios!
     Pero cuando se me heló la sangre fue al escuchar ciertas expresiones del impresentable que me recordaban mucho a un personaje del que soy su voz y su adaptador al español: Stewie. El muchacho violento este soltaba cosas como "quiero ver a mi madre muerta", "la odio", "me gusta verla llorar". 
     Entonces sentí una especie de cargo de conciencia por si mi trabajo con el humor podía influir a descerebrados como este.
     ¿Es posible que no se den cuenta de que esto sólo es humor? ¿Es mi dibujo animado un reflejo de esta espantosa sociedad? ¿Cómo puede haber gente así en la vida real? 
     Y me ha dado miedo, miedo de poder ser una influencia a estos despojos de la sociedad.

     No obstante, después de recapacitarlo, he llegado a la conclusión de que ni yo, ni cualquier persona equilibrada, tenemos la culpa de que haya imbéciles que no sepan distinguir la ficción de la realidad.



sábado, 9 de febrero de 2013

Fluir, moverse y nutrirse


     Amo mi oficio y adoro mi profesión de doblaje, pero me siento un poco triste al ver que, cada día más, se apoderan de ella unas enfermedades que la están destruyendo. Unos de los errores que más daño nos pueden hacer son el endiosamiento y el egocentrismo.
     Tendríamos que ser conscientes de que no somos más que nadie. Querernos, sí, pero querernos lo suficiente como para no tener miedo de la competencia. El temor a que nos desbanquen no es sino una muestra del poco valor que nos damos. Abrirnos a otras posibilidades y no cerrar nuestras puertas a todo lo que viene de fuera para, de este modo, preservar nuestro "trono". 

     El arte necesita fluir, moverse, nutrirse en cada meandro. Lo contrario es estancarse y pudrirse sin nutrientes que mantengan viva esta fuente. Al dedicarnos a esto no firmamos un contrato de por vida, tenemos contratos diarios, y debemos esforzarnos cada día por superarnos. No es buen método eliminar cualquier posible rival.

     Bernarda Alba cerraba sus muros y ofrecía una magnífica fachada mientras el cataclismo iba forjándose entre las paredes de su casa.

     Sé que me pueden acusar de demagogia o de buscar el aplauso por este comentario, pero nada más lejos de mi intención. Simplemente es que tengo memoria. Yo he tenido que luchar día a día, contra viento y marea (y más cosas) y todavía sigo luchando. Nadie nació enseñado y a todos nos dieron la oportunidad de aprender, unos siguieron y otros no. Ley natural. 

viernes, 8 de febrero de 2013

En buena hora.


    Bendita la hora en la que decidí dejar de ir descalzo (como una especie de penitencia) y utilizar los zapatos que tenía guardados en el cajón. Más allá de adulaciones o denigraciones de mis capacidades. 

     Por fin hice caso a mi amigo que llevaba años diciéndomelo: "Sé consciente de quién eres y de dónde estás". Y lo hice. 
     Y empecé a moverme en un universo en el que encuentro satisfacciones cada día. Ni soy infalible, ni soy más que nadie, pero me siento más yo que nunca. Y todo fluye. 
     Encuentro capacidades en mí que tenía olvidadas, disfruto de cada momento sin preocuparme por qué pensarán o qué conseguiré con ello. Dejarse llevar. 
     Y siento la alegría de los triunfos y el aprendizaje de los fracasos. Gozando lo que de bueno tienen ambos, pero sin quedarme atrapado en ellos.

     Gracias a quienes me hacen disfrutar, a quienes me cogen de la mano cuando me ven temblar y a quienes ríen, se emocionan y se esfuerzan a mi lado.

     Bendita la hora. 

jueves, 7 de febrero de 2013

Un cuento


          No me cuentes qué te cuentan,
          cuéntame qué me cuentas tú.
          
          Cuántos cuentos cortan cuellos,
          cantan coplas que cuestionan a cuerdos.
          Cuantas cuentas del collar
          cuesta contar si se descuelgan.

          A fin de cuentas, esto son uvas contadas.

Tener y merecer


    Hay personas que tienen y personas que merecen. No siempre se cumplen los dos requisitos. Pero cuando ves a la gente avanzar con honestidad, sin pisar a nadie, piensas que en algún momento confluirán el merecer y el tener. 
     Por eso, quizá sea egoísmo, pero he descubierto que me produce una gran satisfacción ver a mis amigos triunfar. Egoísmo, sí, porque me gusta disfrutar a la vez que ellos del merecido reconocimiento. Es como conseguir un premio por cada uno de los amigos que lo consiguen. Y así son más que los propios que llegan... bueno, si es que llegan. Pero no me importa, porque tengo los de la gente que quiero.


miércoles, 6 de febrero de 2013

El rescoldo de la pasión


     En un rincón del mundo un corazón se despereza.
     Se calienta de lo vivido y busca calor entre la bruma de la mañana.
     Los rescoldos de la pasión mantienen vivo su fuego
     y el viento de las sombras aviva su llama
     hasta iluminar el camino del día.
     Un minuto más, un instante más de soledad
     para descubrir lo grande que es el mundo.

     Y saluda en silencio, 
     mientras espera que una sonrisa
     lo haga latir una vez más. 


martes, 5 de febrero de 2013

Para bien o para mal



     Pasé demasiado tiempo intentando agradar, preocupándome solo de servir a los demás, entregando sonrisas sin obtener respuesta... hasta que decidí vivir.
     Me di cuenta de que merecía la pena actuar según mi criterio. Para bien o para mal. Me di cuenta de que no tenía sentido comportarme como me decían los demás, porque las consecuencias siempre las iba a pagar yo. Y así, ahora tomo mis propias decisiones, porque son mías. Y acepto encantado todas las consecuencias. Para bien o para mal. 
     Hoy ha sido un día agotador. Pero lo doy por bien empleado por el reencuentro con compañeros y amigos que me recargan de energía y que me aceptan como soy. Y porque mis decisiones de hoy me han llevado a disfrutar cada instante de esta vida que he elegido vivir.

Hoy para desayunar...


     Hay dos tipos de felicidad: la tuya y la mía.
     Tratar de vivir mi felicidad no te llevará a nada, así como vivir yo tu felicidad no hará sino anularme.
     Pasamos tanto tiempo tratando de organizar la felicidad de los demás, que dejamos la nuestra olvidada, apagándose, y criando malas hierbas.
     Así que, hoy arrancaré el día viviendo mi felicidad, disfrutando de cada pequeño aliciente que pueda encontrar debajo de una mirada, una sonrisa, una palabra amable.
     Espero y deseo que tú también vivas tu propia felicidad, que seguro que te está esperando a la vuelta de cualquier esquina, o en una simple taza de café. Y, si la leche cortada te hace mal, no la tomes, sólo podría crearte angustia y vómitos.

     Buenos días

lunes, 4 de febrero de 2013

Del miedo, el cabo.


     El miedo, ese subrepticio compañero que se cuela por las venas de quienes no están seguros de sí mismos.
Aunque nunca lo reconocerán, la repulsión que algunos tienen a cuanto les pueda hacer sombra nace de la propia duda de su valía.
     Por eso yo nunca me he considerado gran cosa, y tengo que ganarme MI confianza día a día. De lo más bajo partí y sé lo que es conseguir paso a paso con esfuerzo lo poco que he conseguido. Y así seguiré día a día, sin acostumbrarme pero sin dejar de luchar por cada objetivo. Por pequeño que sea. 
     Nunca me regalaron nada y nunca firmé un contrato de por vida.
     A por otro reto más.

domingo, 3 de febrero de 2013

Hay cosas que no me cuadran.


     Mientras estudio un texto que habla sobre la comprensión humana, me planteo: ¡Qué fácil es aprenderse la teoría y qué difícil llevarla a la práctica cuando no aparece en el manual!
     Perdonamos globalidades como parte de una bienquista imagen social, pero somos incapaces de ponernos en la piel de quien tenemos al lado. Disculpamos la mordedura de un perro por aquello de "el pobre reacciona por instinto", pero odiamos al vecino que se despistó y no nos saludó un día. 
     Hablamos de comprensión y nos empeñamos en decirles a los demás cómo deben actuar censurándoles lo que no entra en nuestros cánones.
    Qué fácil sería si nos pusiésemos verdaderamente en el lugar del otro.

     Buenas noches.